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¿Logo o no logo? Esa es la cuestión



Hasta hace un tiempo, los propietarios de las empresas pensaban que cualquier regalo que dieran a sus clientes debía llevar impreso su logo. No obstante, los resultados no eran siempre los esperados.


El cliente podía recibir el regalo (la camiseta, la gorra, la agenda o la botella de agua) y jamás usarlo. ¡Triste situación! El inconveniente pudo ser precisamente el uso de su logo. Vamos a ser honestos: a no ser que esas marcas tuvieran una alta recordación, como ocurre con Nike o Adidas, las personas sentían ciertas reservas al momento de usar abiertamente los productos marcados con ellas.


De ahí que sea importante utilizar la estrategia a la hora de marcar tus regalos corporativos. Si quieres sorprender gratamente a tus clientes, puedes entregar tu obsequio marcado no con tu logo sino con el nombre de ellos. Así sentirán tu detalle de una manera más personal.


Ahora que si definitivamente deseas que tu logo aparezca, puedes optar por imprimir más destacado el nombre de la persona y tu marca pequeña. O dale la oportunidad a tu cliente de escoger el regalo que desea recibir de ti: estará tan encantado, que aceptará de buen agrado el que lo imprimas con tu marca.


El tema es más sensible cuando obsequias prendas de vestir, del tipo gorras, camisetas o chaquetas. Con sinceridad: pocos se pelean por lucir en el asado familiar una camiseta que diga "Multifrenos Sterling, la seguridad de su vehículo".


Aquí tienes dos opciones: o imprimir el logo a la altura del pecho, muy pequeño (fíjate cómo imprime la marca Polo su logosímbolo en sus camisetas), o crear una frase muy vendedora e incluso divertida. Ésta será la que se imprima grande y tu logo a un lado, más pequeño, a la manera de firma. ¿Quieres un ejemplo? Imagina una camiseta con una frase que diga: "Piensa diferente". Y a un lado, más pequeño, el logo de Apple. ¡Efectiva!


El uso de tu logo también dependerá del ambiente en el que estará presente tu obsequio. Si vas a regalar un producto para que tu cliente lo use en casa, el logo puede estar desperdiciado. Si, por el contrario, lo usará en la oficina, justo en el lugar donde tomará sus decisiones de compra, entonces imprime tu marca ojalá a full color para que todos la vean.


En este caso, siempre escoge obsequios de larga duración para que tu marca perdure en el tiempo: un cargador de baterías, una agenda, un almanaque o una bolsa reutilizable, son excelentes alternativas.


Por último ten en cuenta el tipo de evento en el que entregarás tu obsequio. Si se trata de un regalo persona a persona, con el que deseas reconocer la fidelidad de un cliente, marcarlo con tu logo quizás no sea tan buena idea.


Pero si se trata de una feria, un seminario o una convención, donde gran cantidad de personas conocerán tu empresa, en ese caso imprime tu logo en todo lo que se te ocurra: bolígrafos, libretas de anotaciones, chaquetas, camisetas, llaveros, linternas, botellas, etc.


No te arrepentirás: según un estudio realizado por la Georgia Southern University, las empresas que emplean regalos corporativos impresos con su marca para promocionarse en ferias y otros eventos públicos, tienen un 176% más tráfico y visitantes que aquellas que no lo hacen. Atrévete y disfruta de los beneficios que estos obsequios promocionales tienen para ti y para tus ventas.


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